Todos los relatos que he leído hasta ahora de Alice Munro – y han sido muchos, desde que la descubrí me tuvo hipnotizada y no paré hasta leer casi toda su obra publicada aquí- fluyen, resulta sencillo sumergirse en su aparente facilidad hasta que caemos en la cuenta de que la historia hace rato que dejó de discurrir por el cauce que esperábamos, que se ha vuelto a adentrar en una de sus múltiples marañas, una historia engarzada a otra y así todas tenuemente relacionadas. Y nos sentimos incapaces de concretar el momento en el que sucedió. Pura magia literaria que da la vuelta a nuestras expectativas narrativas de forma tan inteligente, que si sus historias no nos resultaran reales, parecerían tener truco.
En Secretos a Voces aparecen ocho relatos, ocho mujeres situadas en un entorno agreste, en ocasiones violento. Tal vez cabría mejor decir salvaje, con la fuerza que el ambiente puede provocar en ellas, convirtiéndose así éste en un personaje más. El lugar donde esas mujeres recuerdan, cuentan, intentan defenderse de su relación con los hombres o con los demás, sus vidas. La capacidad de Munro para transmitir las relaciones y el poder que las trasciende siempre me deja admirada. En estos relatos nos las encontramos en el momento que parecen a punto de quebrarse, de dejarse vencer y sin embargo acabamos descubriendo en ellas las grietas en las que poder refugiarse y desde las que observar su fuerza real.
Algunos de los cuentos podrán, quizás, resultar lúgubres pero en palabras de la autora “Por lo que yo sé de la vida, siempre es dura” y si estamos de acuerdo con ella -difícil sería no estarlo, me digo- entenderemos que estos secretos a voces prefieran adentrarse en sus aristas mostrándolas sin temor. Magia pues, pero magia inteligente y en ocasiones dolorosa, como muchas de las mujeres que conozco y a las que admiro. Esas son también sus mujeres.
Ha sido una hermosa sorpresa abrir esta nueva puerta desde tu perfil y reencontrarte aquí, lúcida y cálida como siempre.Me guardo el dato,sé exactamente a quién le regalaré ese libro.
ResponderEliminarLo último que he leído y que me ha atrapado es un libro de poesía,"El tren de Bagdad" de Manuel Forcano, en catalán, aunque creo que hay traducción al castellano.A veces desborda de tan sensual e intenso, pero es realmente mágico.
Un largo y alegre abrazo,lagartija***
Soplillo!!! jajaja. Seas bienvenida a esta cueva de alibabas lectoras!
ResponderEliminarDe alguna forma tenía que matar el gusanillo del blog, sin blog... jeje.
Y que sepais que las catalanas me teneis algo harta, coñe, con la envidia que me dais a veces!! Como no haya traducción vereis la que lío... jajaja.
Abrazo entero!